Letras de cuarentena

Los que pasamos de los cincuenta, sin duda alguna, somos esa generación privilegiada por haber escuchado lo mejor de la música de los 60´, 70´,80´ y parte de los 90´, pero como estamos en el siglo XXI, desayunar con The Beatles, Pink Floyd, ABBA, Status Quo (mi favorito), Kiss, Tierra, viento y Fuego, etc, es para otro momento, por lo que optas por boleros, baladas o música “ligera” pero como no hay opciones en la radio, se tiene que escuchar lo que haya. Y lo que se escucha es la cumbia y la chicha y vaya…

Pasando el dial, se escucha de todo, hay canciones con letras muy bonitas, otras y muchas por decir, no lo encuentro sentido, como de Internacional Yurimaguas y su “Por ahí no” que dice entre otras maravillas “Por ahí no, por ahí no es, mejor así, por a aquí es” o una de Marisol que dice “Préndelo candela, échalo a la calle por sinvergüenza y mantenido” o ésta del Grupo 5 “Za za za moviendo el cuerpito zazaza/ moviendo el culito zazaza/ y tumba tumba tumba tu cuerpo pa' rriba pa' bajo/ pa' un lado pal otro pa' tras pa' delante” y dice que se llama “La culebritica”  o ésta más profunda como “Curititaca ti Curititaca ta”, que lo único que logro entender es “curititaca, curititaca, curiti, curiti, curitaca” ¡Qué profundo!.

Y sigo pasando el dial y escucho a un grupo “El Empuje” con su famosa canción “A tu cola le falta crema” y el repunte es escuchar a un argentino que se hace llamar Damas Gratis con su canción “Hija de P” y en la letra dice “ Sé que ya, ahora sales con él, sos una hija de p porque lo querés a él”, hasta que me encuentro con Tongo y “La Pituca”, Pintura Roja y su “Teléfono” que dice algo así “ Te conocí tan solo tengo tu teléfono/ mi corazón me pide a gritos llámalo ya/dime porque siempre que llamo suena ocupado/ hace dos horas que estoy llamando, no puedo más”. Ya mi tucsiche pierde su calor, mi café pasao se enfría y mi tamal se endura por tanta filosofía, hasta que sigo tratando de escuchar algo más “digerible”.

En una emisora anuncian el show de la cumbia y dejo allí, escucho unas vocecitas como ardillitas cantoras y me dicen que es “Corazón Serrano”, luego una voz varonil de Tony Rosado y dice una de sus canciones  “Que voy hacer si no estás más a mi lado, lloro tu partida, amor estoy sufriendo por tu amor. Me entristece tu partida, amor”, me parece mejor, hasta muevo los pies debajo de la mesa, y suena “Armonía 10” con su “Me emborracho por tu amor, me emborracho, cada vaso que tomo se acaba la vida” y entra la voz del famoso Macuco con su inolvidable “Como voy a olvidarte, porque eres más que mi amor, la razón de mi vivir…” y la cosa se pone mejor, mi esposa, mueve la cabeza y recordamos cuando bailábamos en esas épocas inolvidables.

Luego viene, Grupo 5 y su “Motor y Motivo” que dice “ Luz de mis ojos y aire que respiro, solo con mirarte me has hecho cautivo”, genial y me alegra la mañana con su “Me enamoré de ti y qué” y para levantar el ánimo de la cuarentena escucho a “Agua Marina” y su “Paloma del Alma Mía”, “El embrujo” que alcanzo a escuchar parte de la letra “ Hoy igual que ayer estoy frente al mar esperando por ti, no tardes más por favor que me desespero por ti”, una belleza de letra, tal como se acaba esta icónica canción, se acaba el desayuno y vaya que del desconsuelo inicial, al final encontré sentido a este género que dentro del ritmo hay letras que no pasarán al olvido.

Finalmente, creo que esta cuarentena nos sirve de mucho, uno para “escuchar las canciones” y no dejarse llevar por el ritmo, ya que cuando le toque bailar, sepa que mientras que está "shunto, shunto, shunto", o tirando cintura y "abajo, abajo", no vaya ser que dentro de lo pegajoso del ritmo este recibiendo un insulto o una simplonada de letra que nos haga terminar la fiesta.