Calle Bongará, hoy Ortíz Arrieta
En los últimos meses, una pequeña pero significativa obra pública que tendrá un impacto muy grande en el desarrollo económico y turístico de Chachapoyas, viene dividiendo a la ciudadanía: La remodelación de la antigua calle real, el comercio y hoy denominado Jirón Amazonas. La remodelación contemplada en su plan estratégico del PLAN COPESCO, hoy por hoy es sujeta de cuestionamientos públicos y desconocimientos de intermediarios o voceros entre los propios grupos involucrados y al mismo tiempo beneficiado. Un municipio miope del desarrollo e instancias públicas sordas al clamor del pueblo. Y si se suma a ello que el expediente técnico sufre constantes modificaciones, entenderemos la caótica situación en que nos encontramos.
El jirón Amazonas, es la columna vertebral de la ciudad, por ella se trasladan diariamente más de dos mil personas a su centro de trabajo, entran y salen de sus escuelas los docentes y alumnos, venden y compran cientos de comerciantes y donde se moviliza buenas cantidades de dinero y al mismo tiempo es la zona de distracciones y alojamiento, además de contar con viviendas que han sido declaradas como patrimonio monumentales de la ciudad y por ende del país.
Bajo el pavimento de la actual ciudad se han construido en la etapa virreinal todo un sistema de cunetas que permitían la distribución de aguas servidas por toda la zona histórica, luego remozada y mejorada con los años. El último trabajo ejecutado en las calles Amazonas. Ayacucho, La Merced y Grau fueron ejecutados entre el 14 de mayo de 1,917 y 27 de setiembre de 1,919 con la piedra abastecida por el picapedrero Manuel R. Cabañas Huamán.
Calle La Merced con la intersección de Amazonas
Este sistema de drenaje y canaletas bien elaboradas son parte de evolución histórica de la ciudad que tiene que conservarse, preservarse y darle operatividad. Y al darle utilidad sin lugar a dudas, tiene que convertirse esta calle en vía peatonal, la misma que contribuirá sin duda alguna a valorar los bienes patrimoniales, incrementar el turismo recreativo y por ende al cambio de rubro de algunos negocios dirigidos a la gastronomía, cafeterías, diversión, artesanía y la cultura.
Entendiendo así la importancia de la obra que ya viene superando una inversión económica superior al millón y medio de soles, hemos comprendido al conversar con los “afectados” en este caso, que falta una política de comunicaciones en el gobierno local. Un plan que refleje las actividades, programas y estrategias para promover y concientizar a la opinión pública sobre esta obra, que además de ser importante, será lo único de bueno y relevante que dejará esta gestión.
Jirón Amazonas, cuadra 4
Percibo que la obra era necesaria y como que lo es; pero reevaluando el expediente se tiene que dar lugar los concejos y sugerencias de las personas que afirman lo siguiente:
• ¿Cómo se prevé el recojo de la basura acumulada en las viviendas, restaurantes y hoteles?
• En casos de emergencia ¿Qué papel tendrán los vehículos de la policía, hospital, bomberos en este caso y como accederían a la asistencia, más aún si se tiene planeado colocar bancas ornamentales?
• ¿Se podría otorgar en horas de la noche, la suspensión de las restricciones vehiculares para carga y descarga pero con vehículos menores o traslado de turistas alojados en los diferentes hoteles?
• ¿Se tiene contemplado un garaje público para estacionamiento masivo de vehículos, a fin de descongestionar las calles?
5 comentarios:
En Lima tenemos el Jirón de la Unión y en Arequipa la calle Mercaderes como ejemplo de importantes vías peatonales en pleno centro histórico y ello no ha afectado, sino más bien ha revalorado su posicionamiento turístico y comercial.
La solución a las preguntas planteadas van de la mano con la educación y nuestra responsabilidad ciudadana. Por ejemplo ya ha llegado la hora de implementar el Plan de segregación de residuos sólidos en Chachapoyas, para lo cual la población debe educarse y participar activamente por nuestro propio bienestar.Hasta cuando seguiremos agrediendo a nuestro medio ambiente? el relleno sanitario será una solución sólo de la mano con su PIGARS.
Ojalá esta obra sea eficiente y no genere problemas sociales y económicos en el futuro de la ciudad.
Soledad VC
Lima y Arequipa son ciudades grandes, no las comparemos con Chachapoyas que ya no tiene a donde crecer, en la que sus calles son estrechas y el cremiento del parque automotor es inminente, teniendo en cuenta esto quedramos cerrar la vía mas importante de la ciudad, es como anular una vena sanguínea, eres capaz de vivir sin ella pero el funcionamiento de tu cuerpo nunca será óptimo. Al contrario, que bueno sería si pudiésmos ensanchar las calles y la ciudad puediera soportar el parque automotor que en unos 20 años será el doble o triple de hoy, pero lamentablemente es casi imposible. Quien dice que no se puede hacer una vía que guarde el aspecto histórico-tradicional y que a la vez sea vehícular. Sin ir muy lejos, la ciudad de Zumba en Ecuador (la más cercana al Perú por esta parte), tiene calles estrachas y muy tradicionales, sobre la base de bloques de concreto, bloque armados como una especie de parquet que permiten el tránsito vehicular liviano y semipesado; ejemplos similares tenemos en las ciudades de Nicaragua y otras que tengo referencia, pero aún no las conozco. No nos quedemos en el atraso, so pretexto de lo intangible, la ingeniería y arquitectura dan las soluciones para desarrollar proyectos que preserven lo tracional sin limitar la accesibilidad vehicular que en un tiempo no muy lejano nos hará tanta falta. Si la plata es escaza, no importa hagámoslo calle por calle pero hagámoslo, así como se hizo la Catedral de poco a poco pero ya está quedando casi lista, no dejemos al Jr. Amazonas como un campo minado.
Manuel discrepo con tu punto de vista en culpar a una gestion municipal actual los problemas causado por la gestion precedente y mucho menos mencionar que esta seria la unica obra rescatable a nivel de gestion, pues seria necesario que visitaras el terminal, las cunetas de gran cantidad de calles que han sido mejoradas, algunas calles pavimentadas como jiron junin ortiz arrieta, jiron la merced,jiron libertad y otras de nivel provincial que superan en numero en la gestion de tu compañero Enrique torres que par el colmo de usar los fondos del estado fuen en mejorar las fachadas de los mas pudientes chachapoyanos del jiron amazonas, pues este proyecto fue direccionado y con esas mal formulado y aqui la solucion no es el dialogo sino procesar a todos los que se aprovecharon del estado para benficio personal pues creo que esto deberia ir como ejemplo COMO NO SE DEBE INTERVENIR EN PROYECTOS DE INVERSION PUBLICA DEL SNIP, y que el INC intervenga en lo que vale y le interesa al turista como son las llajtas chachapoya las cuales se estan depredando abusivamente y no en el desague del jiron Amazonas de la epoca republicana.
Aqui la solucion es tecnica y no politica, como lo mencionan los comentarios anteriores, hay que reconocer que este proyecto solo beneficia a un grupo y estuvo mal formulado, la opinion de Pepe Encina es apropiada para estos casos. para tu conocimiento Manuel el grupo de los masones y los "millonarios de chachapoyas" se les ha visto en el distrito de Magdalena, para recibir lotes de terreno gratis que esta ofreciendo el alcalde de Magdalena en su comunidad y cuentan con junta directiva que no lo integra ningun habitante de la Magdalena sino residentes chachapoyanos y estan condicionando a todos parametros urbanisticos antojosos que no los contempla RNE, exigiendo que dejen un retiro minimo de 10m lineales en cada lote, ademas que tiene que construir hasta agosto sino pierden el lote y si no cumplen que se retiren, de esta manera han humillado a la gente necesitada de un predio en este distrito por un grupo de chachapoyanos que tambien tienen casas en el jiron amazonas que muy bien pudiesen invertir en comprarse un fundo y construir sus viviendas como se les de la gana y no quitandoles la oportunidad de campesinos de escasos recursos economicos del Distrito de la Magdalena que aspiran a un lugar donde asentar su vivienda.
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